Conciliar un buen descanso no solo depende de la rutina nocturna, también de lo que comes antes de dormir. Algunos alimentos pueden alterar el sueño, dificultar la digestión y hacer que la noche sea más agitada de lo que esperas.
¿Qué debes tener en cuentan antes de dormir?
Antes de dormir es importante crear un ambiente relajado, evitando la exposición prolongada a pantallas y luces intensas que alteran el ciclo natural del sueño. También conviene establecer horarios regulares para acostarse y levantarse, lo que ayuda a que el cuerpo se acostumbre a un ritmo estable.
Otro punto clave es cuidar lo que consumes en la cena: optar por comidas ligeras y evitar cafeína o alcohol puede marcar la diferencia. Asimismo, practicar técnicas de relajación como la lectura, la respiración profunda o la meditación favorece un descanso más reparador.
¿Cuáles son los alimentos que NO debes comer antes de ir a la cama?
Algunos alimentos pueden dificultar la digestión, alterar el sistema nervioso y hacer que el descanso no sea reparador. A continuación, desplegaremos una lista detallada de los alimentos que conviene evitar antes de dormir:
- Alimentos picantes: estimulan el sistema nervioso y pueden causar acidez o reflujo.
- Comidas grasosas o pesadas: ralentizan la digestión y provocan malestar nocturno.
- Cafeína (café, té, chocolate, energéticas, refrescos): dificulta conciliar y mantener el sueño.
- Alcohol: fragmenta el sueño y reduce su calidad.
- Cítricos y tomates: su acidez y tiramina pueden generar reflujo y mantenerte alerta.
- Quesos curados y embutidos: ricos en grasas y tiramina, estimulan el cerebro.
- Verduras crucíferas (brócoli, coliflor, col): su fibra alta retrasa la digestión.
- Helados y dulces azucarados: activan el metabolismo y dificultan la relajación.
- Lácteos (en intolerantes): generan molestias estomacales e incluso pesadillas.
- Frutas muy hidratantes (sandía, melón): aumentan las ganas de ir al baño en la noche.
- Ajo, cebolla y ensaladas crudas abundantes: pueden provocar gases, acidez o incomodidad.
¿Cuánto tiempo se recomienda esperar después de comer antes de ir a dormir?
Los especialistas sugieren esperar entre 2 y 3 horas después de la cena antes de acostarse. Este lapso permite que la digestión avance lo suficiente y se reduzca el riesgo de acidez, reflujo o sensación de pesadez.
Dormir inmediatamente después de comer puede afectar la calidad del descanso y favorecer molestias estomacales. En cambio, mantener este margen de tiempo ayuda a que el cuerpo se relaje y el sueño sea más reparador.