Este 20 de julio se cumplen 8 años de la muerte de Chester Bennington, y aunque su partida aún duele, hoy no queremos recordarlo con tristeza, sino celebrarlo como merece, haciendo lo que mejor sabía hacer: dejarnos sin aliento con su voz. Una voz que cantaba como un ángel, gritaba como un demonio y que marcó a toda una generación.
A lo largo de esta nota te dejaré videos con sus mejores screams en vivo junto a Linkin Park, y te aseguro que más de uno te pondrá la piel de gallina.
¿Quién fue Chester Bennington?
Chester Bennington fue el vocalista principal de Linkin Park, una de las bandas más influyentes de los años 2000. Con su voz versátil, capaz de pasar del grito más visceral a la melodía más suave, logró crear un estilo único que redefinió el nu-metal y conectó con millones de jóvenes en todo el mundo.
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Más que un cantante, Chester era un canal de emociones crudas, un intérprete que convertía el dolor en arte.
¿Por qué Chester Bennington marcó a toda una generación?
Se dice que Chester Bennington es la voz de toda una generación porque mientras otros cantaban, él gritaba verdades.
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Con canciones como “Given Up” y su icónico scream de 17 segundos, o el estallido emocional de “Breaking The Habit”, nos enseñó que no estábamos solos en nuestros pensamientos más oscuros.
Sus gritos eran catarsis pura, y también lo escuchamos desatar su furia en vivo en himnos como “One Step Closer”, “The Catalyst”, “From The Inside”, “Faint” y por supuesto, “A Place For My Head”, donde su intensidad vocal parecía inhumana.
Aquí te dejo uno de los screams más bestiales:
“Given Up” en vivo.
Otro momento que demuestra por qué su voz era una tormenta: “Breaking The Habit” en directo.
El clásico con el que se desató en mil conciertos: “One Step Closer”.
Un caos perfectamente controlado: “The Catalyst”.
Una joya infravalorada con scream demoledor: “From The Inside”.
Cuando gritaba como si expulsara sus demonios: “A Place For My Head”.
Uno de los screams más eléctricos en vivo: “Faint”.
Una canción que duele distinto
Aunque en esta nota hablamos de los screams más potentes de Chester Bennington, hay una canción que nos rompe desde otro lugar, y se trata de “One More Light”. No tiene gritos. No necesita. Su letra, su interpretación y el contexto en el que se lanzó poco antes de su muerte, hacen que escucharla hoy sea como volver a abrazarlo.
Es, para muchos, la canción con la que más lo recordamos.
¿Cómo fue la muerte de Chester Bennington?
El 20 de julio de 2017, Chester fue encontrado sin vida en su casa en Palos Verdes, California. La causa oficial fue suicidio por ahorcamiento, en un día profundamente simbólico, pues era el cumpleaños de su gran amigo Chris Cornell, quien había fallecido dos meses antes por una razón extrañamente similar.
Su partida fue devastadora, pero su legado es eterno. Sus gritos siguen vibrando en cada fan, en cada concierto grabado, y en cada lágrima que aún cae al escucharlo.
Chester se fue hace 8 años, pero su voz sigue aquí. Chester Bennington no era humano cuando cantaba junto a Linkin Park, era pura emoción en estado crudo. Y por eso, es eterno.