Sabemos que con el verano llegan las altas temperaturas, los ventiladores y las ganas de escapar a la playa. Pero también, y para desgracia de muchos, llegan ellas: las cucarachas. Esos insectos que despiertan todo tipo de reacciones, desde el pánico hasta el impulso de pisarlas sin pensarlo dos veces.
Pero lo que no muchos saben es que esa acción tan común puede traer consecuencias más graves de lo que imaginas. Sigue leyendo y descubre por qué no deberías hacerlo nunca más.
¿Por qué no debes pisar cucarachas?
Primero lo primero; aplastar una cucaracha no garantiza su muerte. Según el entomólogo Ryan Smith, estos insectos tienen la capacidad de soportar hasta 900 veces su peso, gracias a un exoesqueleto tan resistente como flexible. Esta estructura no solo las protege de impactos, sino que les permite escapar rápidamente si el golpe no es lo suficientemente fuerte.
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Además, en muchos casos, las cucarachas fingen estar muertas para huir después. Así que esa pisada que creías letal probablemente solo les dio una anécdota más para contarle a sus compañeras de alcantarilla.
Y si pensabas que darles con el periódico iba a resolver algo, lamento decirte que tampoco es eficaz. Su estructura corporal les permite absorber impactos y redirigir esa energía a sus patas para salir corriendo como si nada.
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¿Qué enfermedades puedes contraer al pisar una cucaracha?
Aquí es donde se pone serio el asunto. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las cucarachas son “carroñeros antihigiénicos en los asentamientos humanos”. Al aplastarlas, podrías estar liberando bacterias peligrosas en el aire, lo que representa un riesgo para la salud.
Foto: Stock Canva
Entre los microorganismos que pueden propagar se encuentran la salmonella, los estafilococos y los estreptococos. Estas bacterias son responsables de enfermedades como la disentería, la diarrea, el cólera y la fiebre tifoidea. Pero eso no es todo: los restos de su cuerpo también pueden desencadenar alergias y ataques de asma, especialmente en personas sensibles o en niños pequeños.
Así que ya lo sabes. Si alguna vez te enfrentas a una cucaracha, tal vez correr no sea tan mala opción después de todo, porque recuerda que no debes pisarlas. O bien, considera llamar a un servicio profesional de fumigación y evita riesgos innecesarios.