Las bolsas en los ojos, esas molestas hinchazones que aparecen debajo del párpado inferior, no solo son un tema estético, sino que también pueden ser un reflejo del estado de salud general.
Su aparición ha llevado a miles de personas a buscar soluciones, ya sea mediante cirugías, cremas, remedios naturales o incluso cambios de hábitos.
¿Cuáles son las principales causas de las bolsas en los ojos?
Según especialistas en dermatología y salud ocular, las bolsas en los ojos pueden originarse por diversos factores cotidianos como la falta de sueño, una alimentación deficiente, el estrés, el tabaco y el consumo de alcohol.
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Sin embargo, también pueden ser una señal de advertencia más profunda. Debido a que cuando las bolsas persisten, son de color inusual o tienen una forma anormal, podrían estar asociadas a enfermedades como: Diabetes, enfermedades cardiovasculares y Trastornos autoinmunes.
Así mismo, en muchos casos, el estrés provoca una producción excesiva de cortisol, hormona que genera retención de líquidos e hinchazón, especialmente en la zona de los ojos.
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La mejor estrategia para evitar bolsas en los ojos: la prevención
Para mantener la piel del contorno de ojos en buen estado y evitar la aparición de bolsas, los especialistas coinciden en que la prevención es clave. Entre los hábitos más recomendados se encuentran:
- Dormir entre 7 y 8 horas diarias
- Disminuir el consumo de sal y alcohol
- Mantener una buena hidratación
- Aplicar protector solar también en la zona del contorno de ojos
- Evitar el tabaco
- Hacer pausas visuales durante el trabajo frente a pantallas
¿Qué técnicas naturales o estéticas ayudan a eliminar bolsas bajo los ojos rápidamente y sin dolor?
La solución más rápida y duradera es la blefaroplastia, una cirugía ambulatoria que corrige los párpados caídos o con exceso de grasa, especialmente cuando las bolsas son producto del envejecimiento.
Sin embargo, también existen opciones naturales con té para reducir la hinchazón de manera temporal y sin costo elevado:
- Remojar dos bolsitas de té negro o verde en agua caliente durante 5 minutos.
- Colocarlas en el refrigerador por 15 a 20 minutos.
- Aplicarlas sobre los ojos cerrados entre 10 y 20 minutos.
- Enjuagar la zona con agua fría.
Este tipo de prácticas pueden ayudar a aliviar la inflamación ocasional, aunque si las bolsas son persistentes o presentan un color extraño, lo ideal es consultar a un especialista, ya que podrían ser un síntoma temprano de enfermedades que requieren atención.