Así puedes preparar exfoliante casero con miel para hidratar tu piel y dejarla extra suave
Así puedes hacer el mejor exfoliante, solo necesitas ingredientes caseros que estarán disponibles en la cocina de tu casa.
A quien de nosotros no nos gusta tener la piel suave, aunque existen varios productos que son exfoliantes, también hay versiones más naturales y alejadas de químicos que puedes hacer con ingredientes que están en tu casa, aquí te dejamos un exfoliante con base de miel, que te ayudaran a hidratarla y mantenerla suave durante mucho tiempo.
La miel tiene muchos beneficios y usos en nuestra vida diaria, además de ser un gran alimento, también funciona como remedio a algunos problemas, por ejemplo; sirve para tratar la tos o para mantener hidratada, la piel. Por eso aquí te contamos como puedes realizar un exfoliante casero.
¿Cómo preparar un exfoliante de piel casero con miel?
Para poder realizar este exfoliante que promete dejarte la piel muy hidratada y sobre todo suave, solo se necesitan ingredientes caseros, que cualquier persona tiene en su hogar, con lo que ayudara a que tu piel se vea radiante.
Te podría interesar
Los ingredientes que necesitan son azúcar, aceite de oliva, miel y aceite de coco. Estos ingredientes por separados son un gran aliado para la piel, pero juntos se convierten en el exfoliante perfecto para poder tenerla radiante y muy suave.
Como funciona cada ingrediente en el exfoliante de miel casero
La conjunción de estos ingredientes es muy buena para mantener al cien por ciento la piel, por ejemplo; el azúcar con el aceite de oliva, ayudan a remover todas las partículas muertas; por su parte la miel y el aceite de coco son una gran herramienta para mantener la piel hidratada.
Te podría interesar
Pasos para crear el exfoliante de miel para hidratar la piel
Estas son las porciones necesarias para crear el gran hidratante de piel.
- 1 taza de azúcar
- 1/2 taza de Miel
- 1/2 taza de Aceite de coco
- 2 cucharadas de Aceite de oliva
Ya que tengamos todos los ingredientes, solo debemos seguir los siguientes pasos.
- Mezcla el azúcar y la miel.
- Derrite el aceite de coco a baño maría y agrégalo a la mezcla anterior.
- Tu exfoliante estará listo cuando formes una pasta densa y fluida.
- Guárdalo en un frasco de vidrio y mantenlo en refrigeración.
Para poder tener el mejor resultado, solo se necesita untar la mezcla y frotar por unos minutos, dejar reposar, para después enjugar la piel con agua tibia, teniendo el mejor exfoliante casero para hidratar la piel y mantenerla suave.