¿Qué hacer si te muerde o araña un gato de la calle? Conoce si es peligroso y el tratamiento

Los gatos son reconocidos mundialmente por ser animales domésticos afectuosos, inteligentes y sobre todo, confiables. Su compañía aporta calma, alegría y momentos de ternura a quienes deciden compartir su vida con ellos. Sin embargo, al encontrarse con un gato en la calle, es importante tener precaución.

Aunque los gatos suelen ser animales sociables, no siempre reconocen a las personas que se cruzan en su camino. Un encuentro inesperado puede hacer que se sientan amenazados o inseguros, reaccionando con arañazos o mordeduras. Por eso, los especialistas aconsejan mantener la calma, evitar movimientos bruscos y prestar atención a las señales de alerta del felino, como el erizamiento del pelo, los silbidos o los movimientos defensivos de la cola.

Además, las mordeduras de gato representan un riesgo significativo para la salud humana. Lo que puede parecer un accidente menor tiene el potencial de generar infecciones graves e incluso la llamada “enfermedad del arañazo de gato”.

¿Por qué las mordeduras de gato pueden ser más peligrosas de lo que parecen?

Según expertos, las mordeduras de gatos son menos comunes que las de otros animales, pero son más propensas a infectarse. Esto se debe a que sus dientes largos y afilados pueden producir heridas punzantes profundas, que facilitan la entrada de bacterias directamente a los tejidos o al torrente sanguíneo. 

La situación se agrava si el gato no está vacunado o si se trata de un animal callejero, lo que aumenta el riesgo de enfermedades como rabia o tétanos.

El tiempo de aparición de síntomas cómo enrojecimiento, dolor e inflamación, también es un indicador de gravedad y cualquier signo preocupante debe motivar atención médica inmediata.

¿Qué es la enfermedad del arañazo de gato y cómo se transmite a los humanos?

La bacteria Bartonella henselae, responsable de la enfermedad del arañazo de gato, puede estar presente incluso en gatos aparentemente sanos, ya que se estima que hasta un 20% de los felinos la han tenido activa en algún momento. 

La infección se manifiesta mediante pápulas o nódulos en el sitio de la mordedura o arañazo, inflamación de ganglios linfáticos, fiebre, fatiga y dolor en articulaciones. En casos graves, puede causar complicaciones como encefalopatía, osteomielitis o endocarditis.

¿Cómo se debe tratar una mordedura de gato para prevenir infecciones graves?

El primer paso es limpiar la herida con agua y jabón, retirando suciedad y bacterias. Si la hemorragia persiste, aplicar presión suave y cubrir con un vendaje limpio. La gravedad de la mordida determina el siguiente paso:

Si la mordedura no es profunda y el gato está vacunado, se puede realizar una limpieza cuidadosa y aplicar medidas caseras para reducir el riesgo de infección. 

Sin embargo, en la mayoría de los casos, los profesionales recomiendan tratamiento con antibióticos como amoxicilina-clavulánico, cefalosporinas o doxiciclina, siempre bajo supervisión médica.

Incluso los arañazos leves pueden infectarse si no se desinfectan correctamente, causando enrojecimiento, inflamación o aparición de pus. Por ello, la atención temprana es clave para prevenir complicaciones graves.