Motul, Yucatán, es uno de los Pueblos Mágicos más encantadores del sureste mexicano. Ubicado a tan solo 30 minutos de Mérida, este destino ofrece a los viajeros una experiencia única donde se combina la historia colonial, la riqueza natural y una gastronomía inigualable.
Famoso por ser la cuna de los tradicionales huevos motuleños y del caudillo Felipe Carrillo Puerto, Motul invita a recorrer sus calles, explorar cenotes y descubrir su legado henequenero.
¿Qué hacer en Motul, Pueblo Mágico de Yucatán?
Las opciones para disfrutar de Motul son abundantes. Uno de los lugares imperdibles es el cenote Sambulá, una gruta subterránea iluminada donde se puede nadar, practicar esnórquel o simplemente admirar sus aguas cristalinas. Con una profundidad que alcanza los 8 metros en ciertas temporadas, este espacio es perfecto para refrescarse en un entorno íntimo y natural.
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Otro atractivo es el Museo Felipe Carrillo Puerto, donde los visitantes conocen la vida y legado del líder revolucionario y defensor de la lengua maya. También destacan las exhaciendas cercanas como Kancabchén, San José Hilí y Ticopó Gutiérrez, testimonios de la época del “oro verde”, cuando el henequén impulsaba la economía regional.
Para los amantes de la arquitectura, el templo y exconvento de San Juan Bautista es una joya colonial que data del siglo XVI. Su fachada sobria y elegante, junto con el arco labrado en piedra, refleja la grandeza histórica del lugar.
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¿Cómo llegar a Motul, Yucatán?
Acceder a este Pueblo Mágico es muy sencillo. Desde Mérida se puede llegar en automóvil particular en aproximadamente 30 minutos por la carretera Mérida–Motul.
También existen opciones en transporte público, como los Autobuses Noreste, con boletos que oscilan entre 29 y 59 pesos, y salidas desde el centro de Mérida. Otra alternativa son los taxis colectivos, que parten con frecuencia desde las inmediaciones de la Catedral.
¿Dónde comer y qué probar en Motul?
La visita no estaría completa sin degustar los famosos huevos motuleños, un platillo que nació en esta ciudad y se ha convertido en emblema gastronómico de Yucatán. La parada obligada es con doña Evelia, en el segundo piso del Mercado Municipal 20 de Noviembre, donde los comensales disfrutan de la receta original.
Además, restaurantes como Sambulá ofrecen una variedad de platillos típicos yucatecos que complementan la experiencia culinaria.
Motul es mucho más que un Pueblo Mágico: es un viaje a través del tiempo. Sus plazas centrales con letras coloridas, sus calles coloniales, sus cenotes y su riqueza histórica lo convierten en un destino imprescindible. Ya sea para una escapada de un día desde Mérida o para una estancia más prolongada, este pueblo ofrece un mosaico de cultura, sabor y tradición que enamora a todo viajero.