¿Cuántos y cuáles son los pueblos mágicos de Hidalgo? Estas son todas las atracciones que puedes visitar

Tanto para el turista extranjero como para el visitante local, México es uno de los países latinoamericanos con más riqueza cultural e historia ancestral. Además, el país posee destinos paradisíacos para vacacionar y encontrar conexión con la naturaleza y las tradiciones de cada región.

Así es el caso del estado de Hidalgo, cuya región tiene un pasado histórico relevante para México y posee nueve Pueblos Mágicos. Estos últimos son localidades que fueron designadas de dicha manera por la Secretaría de Turismo por su aporte cultural. Conoce cuáles son y qué atracciones son imperdibles.

¿Cuáles son los 9 Pueblos Mágicos de Hidalgo?

Los 9 Pueblos Mágicos de Hidalgo tienen su belleza propia y única. Estas son sus principales atracciones.

Zempoala

Este pueblo lleno de historia ancestral y memoria colectiva, posee paisajes pintorescos entre haciendas y charros. Su gastronomía es digna de la cocina prehispánica y el pulque es una de las bebidas emblemáticas de la zona. 

Tecozautla

Este Pueblo Mágico de Hidalgo es un oasis en medio del semidesierto del Bajío Hidalguense. La localidad cuenta con muchos balnearios de cálidas aguas termales, que invitan a conectar con la naturaleza y escapar de la rutina. Pero la región también posee su rico pasado histórico de arquitectura y arqueología.  

Huichapan

Este pueblo fue tierra de arrieros que llevaban cargas y diligencias por el Camino Real de Tierra Adentro. La zona pasó a la historia por personajes que protagonizaron la Independencia de México, como Julián Villagrán. Sus paisajes encantan con sus construcciones de cantera.

Real del Monte

Existen varios pueblos con pasado minero en México y este es uno de ellos. Los paisajes que regala esta zona son protagonizados por casonas y en muchas de ellas se puede percibir el aroma a pan de pulque. La mística de este lugar se lo otorga la neblina que llega con cada tarde.

Acaxochitlán

Este Pueblo Mágico de Hidalgo se localiza a 71 kilómetros de Pachuca y a 2 horas de la Ciudad de México (CDMX). La región cuenta con varios espacios naturales con bosques y cerros para hacer senderismo, y también con sitios para adquirir artesanías y disfrutar la más deliciosa gastronomía. Parte de sus atracciones son las cascadas que se encuentran en las comunidades de Toxtla, Santa Catarina, Chimalapa, San Francisco y San Fernando.

Huasca de Ocampo

Esta región hidalguense ofrece imponentes paisajes de bosques y barrancas, ideales para conectar con la naturaleza y hacer senderismo. Pétreos, cascadas y presas son los protagonistas de las postales que se llevan los turistas grabadas en las retinas. Uno de sus principales atractivos son los Prismas Basálticos, formaciones originadas por el enfriamiento de la lava.

Metztitlán

Su nombre deriva del náhuatl Metzli, que significa 'luna' y Tlan, que significa 'lugar'. Por este motivo, la región es conocida como el lugar de luna. Este pueblo posee sierras, mesetas, cañones y llanuras, además de una inmensa riqueza natural, tradición y cultura. Sus paisajes son panorámicos y se pueden disfrutar diversas actividades al aire libre. La Barranca de Metztitlán fue declarada reserva de la biósfera en el año 2000.

Mineral del Chico

Otro Pueblo Mágico de Hidalgo con pasado e historia minera.. Sus paisajes ofrecen recorridos por socavones y senderos donde muchos visitantes disfrutan caminar por varias horas. La región posee manantiales y arroyos de aguas termales. El Mirador del Cuervo regala imponentes vistas panorámicas de la sierra. El destino es ideal para andar en bicicleta de montaña y acampar en familia o con amigos.

Zimapán

La Presa de Zimapán es uno de los atractivos principales de este Pueblo Mágico hidalguense. Sus bosques y grutas con aguas termales invitan a hacer senderismo y meditación en un entorno natural y lejos de los ruidos de la ciudad. Otro punto imperdible para conocer es la Parroquia de San Juan Bautista: una de las construcciones barrocas más destacadas de la Sierra Gorda, que posee una escultura en forma de flama, con una planta octagonal y medallones con figuras de santos.