¿Cómo hacer que el ventilador eche aire FRÍO con este sencillo truco casero?

Las temperaturas extremas siguen haciéndose presentes en México, logrando grandes estragos en las personas, pues son muy pocos los lugares frescos de en los que podemos refugiarnos del molesto calor, por eso aquí te dejamos este truco para hacer que tu ventilador eche aire frío.

En el mercado hay muchas opciones de los llamados minisplits o aires acondicionados, por lo que algunas personas dejan de lado su viejo ventilador, cuando existe esta opción que podría renovar la forma de aventar aire de este artefacto.

No importa como le digas, si eres del norte abanico, si eres del centro y el sur ventilador; su función es echar aire y tratar de refrescar los lugares donde se coloca, pero ahora con este gran truco podrás hacer que ese aire se convierta en frío.

¿Qué hacer para que el ventilador eche aire frío?

 Lo único que necesitamos para poder lograr este gran truco y refrescar de principio a fin la casa, es un ventilador, dos botellas de plástico y unos cubitos de hielo. Con esto podrás generar un mejor ambiente en tu casa.

Procedimiento

• Toma tus dos botellas de plástico y corta de forma horizontal la base, pero no la desprendas por completo.
• A continuación, tomar un clavo y caliéntalo para crear agujeros de tamaño mediano sobre toda la base de la botella, excepto en la zona en la que disminuye su tamaño ni en la boquilla.
• Tienes que sujetarlo en la base del ventilador, es decir, la reja metálica, pero déjalo justo por detrás.
• Más tarde, llene sus botellas con cubos de hielo y enciende su ventilador.
• Al cabo de unos segundos notarás cómo el aire comienza a salir más frío.
• Y cuando los hielos comiencen a derretirse, puedes tomar una cubeta y colocarlo justo por debajo de las botellas, abrir las tapas y recolectar el agua, misma que puedes reutilizar, congelándola de nuevo.

Así que ya sabes, de esta sencilla forma podrás logras que tu ventilador eche aire frío y lo mejor es que casi no gastarás nada, una gran opción para librarnos del molesto calor.