¿Qué es el estrés térmico por calor y cuáles son sus síntomas? Así puedes prevenirlo y tratarlo
Primera onda de calor 2024 en México: Conoce qué es el estrés por calor y cuáles son sus efectos en el cuerpo.
El estrés térmico por calor es una condición seria que puede afectar la salud de las personas expuestas a altas temperaturas durante períodos prolongados en la calle, el trabajo o el hogar.
Conocer los síntomas, cómo quitarlo y las medidas preventivas adecuadas puede ayudar a protegerte y mantener un estado de salud estable y seguro frente a las altas temperaturas durante una ola de calor.
¿Qué es el estrés por calor?
El estrés por calor ocurre cuando el cuerpo no puede regular su temperatura interna de manera efectiva debido a la exposición a altas temperaturas y humedad. Esto puede llevar a una serie de problemas de salud, desde malestar leve hasta condiciones graves como golpes de calor y agotamiento por calor.
Te podría interesar
¿Cómo saber si hay estrés térmico? Estos son sus síntomas y efectos del calor en el cuerpo
- Los calambres en los músculos pueden ser uno de los primeros signos de estrés térmico por calor
- Sensación de cansancio extremo y debilidad generalizada
- Desorientación, pérdida de equilibrio, mareos y dificultad para concentrarse
- Sudoración excesiva como mecanismo de enfriamiento del cuerpo
- Malestar estomacal que puede acompañarse de náuseas y vómitos.
- La piel puede sentirse caliente al tacto y mostrar enrojecimiento.
¿Qué hacer en caso de estrés térmico?
Retirarse a un lugar fresco y sombreado para descansar y permitir que el cuerpo se enfríe. Beber líquidos frescos y sin alcohol para reponer los fluidos perdidos por la sudoración.
Si el malestar continúa, puedes colocar compresas frías en el cuello, la frente y las axilas para ayudar a bajar la temperatura corporal.
Te podría interesar
Evitar la actividad física extenuante y descansar hasta que los síntomas disminuyan. Si los síntomas empeoran, es importante buscar atención médica profesional.
¿Cómo prevenir el estrés por calor?
- Usar ropa ligera, de colores claros y tejidos transpirables
- Evitar la exposición prolongada al sol durante las horas más calurosas del día y limitar la actividad física intensa
- Beber agua regularmente incluso si no se siente sed, especialmente al realizar actividades al aire libre
- Mantener el hogar y el lugar de trabajo frescos mediante el uso de ventiladores, aire acondicionado y sombras.
Es fundamental estar atentos a nuestro cuerpo, mantenernos hidratados y buscar ayuda médica si experimentamos signos de estrés térmico por calor para evitar complicaciones graves.