¿Qué es el dragón barbudo y por qué lo recomiendan como mascota? Ventajas y cómo cuidarlo
Los dragones barbudos requieren un tanque de vidrio con temperatura controlada, iluminación UVB y espacios para trepar, lo que garantiza su bienestar y longevidad como mascota exótica.
Los dragones barbudos se han convertido en una de las mascotas exóticas más populares en todo el mundo. Originarios de Australia y Nueva Guinea, estos reptiles pertenecen a la familia de los lagartos Ágamidos y destacan por su lengua pegajosa, su habilidad para trepar y su característico cuello espinoso que pueden erizar como defensa o comunicación.
En la naturaleza, habitan sabanas, bosques subtropicales, matorrales y zonas desérticas, adaptándose a climas secos y cálidos. Su popularidad como mascota creció en la década de 1990, impulsada por su aparición en películas como Harry Potter: La cámara secreta, Holes y La isla de Nim.
¿Qué tipos de dragones barbudos existen y cuánto viven?
Existen ocho especies de dragones barbudos, pero los más comunes en hogares pertenecen al género Pogona. Entre ellos destacan:
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- Pogona vitticeps: conocido como dragón barbudo central, mide alrededor de 60 cm incluyendo la cola. Es tranquilo, ideal para principiantes y presenta una cara triangular suave.
- Pogona barbata: dragón barbudo común u oriental, ligeramente más pequeño, con rasgos más definidos que el P. vitticeps.
- Pogona henrylawsoni: dragón barbudo pigmeo o de Rankin, mide unos 30 cm y es ideal para espacios pequeños, además de ofrecer diversidad de colores gracias a la cría selectiva.
En cuanto a su esperanza de vida, los dragones barbudos pueden vivir entre 8 y 12 años en cautiverio si reciben los cuidados adecuados, alimentación balanceada y revisiones veterinarias periódicas.
¿Cómo cuidar a tu dragón barbudo en casa?
Los dragones barbudos requieren un entorno controlado con temperatura y humedad adecuadas. Se recomienda un tanque de vidrio: 10 galones para bebés, 20 para juveniles y 40 o más para adultos. Es importante incluir troncos, piedras y plantas seguras para trepar y tomar el sol. Evita arenas o gravilla que puedan causar obstrucciones gastrointestinales, y usa sustratos como baldosas, toallas de papel o alfombra para reptiles.
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La iluminación es crucial: necesitan exposición a rayos UVA y UVB para sintetizar vitamina D3 y procesar el calcio. La temperatura ideal va de 32 a 38?°C durante el día para adultos, bajando a 22–27?°C por la noche. Durante la muda, mantener la humedad entre 50?% y 60?% facilita el desprendimiento de la piel.
¿Qué comen los dragones barbudos y cómo manejar su comportamiento?
Son omnívoros: los adultos deben consumir 70–80?% de verduras de hoja verde y frutas como golosina, mientras que 20–30?% de su dieta incluye insectos vivos, como grillos, cucarachas dubia o gusanos fénix. Las crías requieren más insectos y deben ser alimentadas varias veces al día.
En comportamiento, son solitarios y territoriales; nunca se deben mantener varios dragones juntos. Se comunican mediante movimientos de cabeza, cola y cuerpo.
Son sociables con humanos y pueden ser adiestrados desde jóvenes. Les gusta explorar, tomar baños tibios y pasar tiempo fuera de su jaula, siempre bajo supervisión. Con cuidados adecuados, los dragones barbudos son mascotas longevas, interactivas y visualmente atractivas, ideales para quienes buscan reptiles sociables y manejables.