El pueblo mágico cerca de CDMX que tiene una laguna escondida con paisajes europeos
Un lago para relajarte te espera a solo unos minutos de la capital del país.
El día de hoy te vamos a presentar el pueblo mágico cerca de Ciudad de México (CDMX) que tiene una laguna escondida con paisajes europeos, que seguramente será uno de tus favoritos, tomando en cuenta que, como mencionamos, no es un viaje muy largo para poder disfrutar de todo lo que ofrece.
Villa del Carbón es un pintoresco municipio es famoso por su producción de artesanías en piel, como botas, cinturones y sombreros, que puedes adquirir como recuerdos únicos de tu visita, aunque también se distingue por su deliciosa gastronomía con platillos típicos como el mole, las carnitas y las quesadillas hechas con tortillas de maíz nixtamalizado.
Es a solo unos pasos de este hermoso pueblo mágico que se encuentra una laguna que ofrece paisajes dignos de cualquier viaje europeo, muy cerca de CDMX, pues, nos separa un recorrido en carretera de poco más de dos horas para llegar al corazón del Estado de México.
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¿Qué hacer en Llano de Lobos?
Enclavado en el encantador municipio de Villa del Carbón, Estado de México, Llano de Lobos se presenta como un verdadero santuario para los amantes de la naturaleza y la tranquilidad, este rincón es el escenario perfecto para disfrutar de paisajes impresionantes, actividades al aire libre y una desconexión total del bullicio de la ciudad, es conocido por su belleza escénica y su ambiente relajante.
Es un lugar ideal para quienes buscan experiencias en sus amplias praderas y bosques de pinos invitan a realizar senderismo, ciclismo de montaña y picnics en familia, el clima templado durante gran parte del año permite disfrutar de paseos tranquilos mientras se admiran las vistas panorámicas de la región.
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Uno de los mayores atractivos del lugar es su embalse, donde los visitantes pueden practicar pesca deportiva o simplemente relajarse junto al agua, además, la zona cuenta con espacios acondicionados para acampar, ofreciendo la oportunidad de pasar una noche bajo las estrellas y despertar con el canto de las aves.